Nuevamente se vivió una gran
tarde de toros en la Plaza Vista Alegre en Machachi, una plaza casi
llena con una afición prendida, presagiaban lo que sería una nueva tarde
de triunfo. Los aficionados que se dieron cita para ver en acción a los
diestros Curro Díaz y Guillermo Albán que repetían su actuación a año
seguido esta vez acompañados en el cartel con la rejoneadora portuguesa
Sonia Matías y el rejoneador Álvaro Mejía, salieron satisfechas de la
plaza.
Abrió plaza el joven rejoneador Álvaro
Mejía que cortó una oreja a su novillo tras una buena faena, demostrando
el gran dominio que tiene sobre sus caballos y colocando banderillas de
gran factura, fue premiado con una oreja y aplaudido por el público
presente.
Curro Díaz cortó una oreja a cada toro
de su lote, en su primero, un toro serio con trapío y presencia, realizó
una faena de mérito con mucho temple, con su toreo de gran categoría de
mano baja y con detalles artísticos. El astado le propinó un puntazo en
su pierna izquierda y le rasgó su taleguilla, pero el diestro de
Linares continuó su faena sin inmutarse, lo despachó de una certera
estocada y dio la vuelta al ruedo con una oreja en su mano. Su segundo
toro no colaboró para el completo lucimiento del diestro español, pero
lo toreó con varias tandas de derechazos y naturales de gran factura,
para luego despacharlo de una estocada en todo lo alto que le valió una
oreja y de esa manera asegurar la salida por la puerta grande igual que
en el año anterior. Muy buena actuación del torero de Linares que se
entregó por completo y demostró su categoría y el buen momento que se
encuentra atravesando.
Guillermo Albán volvió a repetir su
triunfal actuación del 2.015, cortó dos orejas a su primer toro luego de
una gran faena y una estocada en todo lo alto que hizo rodar al toro
sin puntilla. En el segundo toro del hierro de Vista hermosa de nombre
Gerolimpio, vino nuevamente el éxtasis en la plaza, el diestro
guayaquileño se dio gusto toreando a este buen toro que tuvo trapío,
fijeza, nobleza y nunca se cansó de embestir, acudió a la muleta del
diestro de la tierra una y otra vez. Nunca buscó las tablas, fue un toro
bravo y en nuestra opinión cumplió con los requisitos para su indulto.
Indulto que fue pedido por la gran mayoría de la afición presente, y el
presidente de plaza lo concedió tras la gran faena de Albán, que lo
toreó a gusto y con gran variedad, toreo que caló en los graderíos que
gozaron con la actuación del torero ecuatoriano. Dos orejas y rabo
simbólico en una vuelta al ruedo triunfal.
La rejoneadora portuguesa Sonia Matías,
se prodigó en su presentación, realizó un gran esfuerzo, colocó varias
banderillas de muy buena factura, pero al final le costó y tuvo que
retirarse del ruedo por problemas físicos. Fue el sobresaliente, el
novillero José Luis Cumba que pasaportó al toro de la rejoneadora.
Tardes como estas son las que mantienen
viva la fiesta brava ecuatoriana, con integridad de la lidia, con
toreros nacionales triunfando y figuras extranjeras entregadas. Una
plaza llena, con gran ambiente dentro y fuera de la misma. La
organización cuidando los detalles, entregando pañuelos a la afición
para pedir trofeos de manera correcta, con banda para amenizar la
corrida, se vivió una gran fiesta sin duda.
Síntesis del festejo:
Álvaro Mejía oreja.
Curro Díaz oreja y oreja.
Guillermo Albán dos orejas y dos orejas y rabo simbólico (indulto)
Sonia Matías silencio tras avisos.
El toro Gerolimpio de Vistahermosa fue indultado por Guillermo Albán. La plaza lució casi llena de aficionados.